Por qué comprar Whisky Johnnie Walker Black Label Islay Origin

En la elaboración de este whisky escocés de 12 años, Johnnie Walker, reconocida marca mundial, ha elegido las dos mejores destilerías de Islay para este blended. Los whiskies que conforman la mezcla de Johnnie Walker Black Label Islay Origin son los de las famosas destilerías Lagavulin y Caol Ila. ¿Qué podría salir mal?

El resultado de esta mezcla es un producto con personalidad propia, con un sutil pero cautivador dulzor, y el inimitable toque ahumado de las maltas de Islay, secadas sin prisas con el calor y humo de las turbas, que se ven reflejadas en cada gota de este honorable whisky.

Este mítico sabor ahumado lo aporta dicha turba, un material orgánico mineral que se usa para secar las maltas y granos que componen el whisky. La combustión de esta materia es lenta y apenas desprende fuego, pero sí mucho calor y humo, que se impregna lentamente en los componentes base de Johnnie Walker Black Label Islay Origin.

Notas de cata. Vista, olfato y gusto

Johnnie Walker Black Label Islay Origin luce un profundo y brillante color ámbar y se muestra con buen cuerpo en copa.

En nariz las notas protagonistas son ahumadas con toques herbáceos.

Al probar Johnnie Walker Black Label Islay Origin, en boca resulta agradable, con estas notas ahumadas de la turba y matices de fruta seca, con un ligero toque final agrio.

Cómo degustarlo. Maridaje

Johnnie Walker Black Label Islay Origin es un Blended de 12 años que destaca por sus notas ahumadas originales de Islay. Al tratarse de un whisky premium, puedes tomarlo solo, con hielo o con agua mineral. Puede aportar toques interesantes a tus mezclas con soda o ginger-ale. Será un acierto lo tomes como lo tomes.

Un poco de historia sobre Johnnie Walker Black Label Islay Origin Estuchado...

Johnnie Walker Black Label Islay Origin es una edición especial que forma parte de una gama diseñada por la marca Johnnie Walker, que hace honor a los puntos más especiales en el mundo del whisky escocés.

Esta edición es fruto de los mejores whiskies de Islay: Lagavulin y Caol Ila. Este lugar es reconocido mundialmente por sus whiskies ahumados.

Al morir el padre de John, en el 1819, en lugar de venirse abajo, el joven Walker decide vender la granja de su padre y emprender un nuevo negocio en Kilmarnock, para así convertirse en un hombre de negocios.

Un tiempo más tarde John descubre su talento para elaborar whisky y decide comercializarlo. Nunca se conformó y viajó durante toda su vida buscando inspiración y los mejores ingredientes para sus creaciones.

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