Por qué comprar Whisky Bruichladdich Port Charlotte Scottish Barley Estuchado

Dos cosas hacen destacar a esta bebida y hacerla distintiva: la turba y la denominación de origen de la isla de Islay.

La primera se refiere al combustible a través el cual se calienta la malta en este caso y que cobra mucha importancia en su sabor ahumado.

La segunda garantiza la procedencia tanto de la malta como del agua de manantial usadas para fabricar este producto, ya que es un lugar con mucho reconocimiento en la elaboración del Whisky y otras marcas lo usan en vano para aprovechar su buen nombre.

Notas de cata. Vista, olfato y gusto

Color: de un color intenso y atractivo que recuerda al del lirio dorado. Muy puro y auténtico ya que no se le añade colorantes artificiales.

Olfato: un inicio asertivo nos presenta el olor ahumado de la turba que nos acompañará durante todo este viaje, mientras nos evoca las borrascas atlánticas características de la región. Rápidamente nuestros sentidos serán inundados por notas de yodo, conchas marinas, duelas de roble, pimienta negra, pimentón y tabaco de cuero.

Una segunda oleada llegará aportando vainilla, higos y dátiles suaves, pera marinada, malta recién molida, caramelo oscuro y nueces.

En boca: el sabor dulce, suave y cálido caracterizarán al oleaje que irá rompiendo armoniosamente contra nuestro paladar. A pesar de esta suavidad, las olas van dejando sabores complejos, profundos y con carácter; marcados por el contraste entre el dulzor ahumado de la cebada y la frescura marina, aportada por la destilación, que se refuerza con la riqueza de la vainilla y el caramelo. Mientras tanto el toque cítrico y el sabor a roble dan fuerza a esta complejidad.

El final es largo, conmovedor y despierta un fuerte sentimiento embriagador en nuestro interior.

Cómo degustarlo. Maridaje

El característico sabor ahumado de este Whisky hace que sea muy interesante para maridar con distintos alimentos. Desde Yo Pongo El Hielo recomendamos que te sirvas una copa sola o con unos hielos y lo acompañes con:

• Quesos azules: estos tipos de queso tienen un sabor muy intenso. Atrévete con el mítico Roquefort o con algo más suave como el Gorgonzola.
• Chocolate negro: un buen chocolate que mezcle la dulzura con un sabor intenso y puro a cacao (entre 60 y 80 de porcentaje) te hará disfrutar sin duda de esta experiencia.
• Ostras: si te gusta este lujurioso molusco, el toque marino y cítrico del Port Charlotte casa perfectamente con él.

Un poco de historia sobre Port Charlotte Scottish Barley...

Port Charlotte es el nombre del pueblo cercano al lugar donde se fabrica esta bebida, Bruichladdich. Ambas se sitúan en la isla de Islay, donde se fabrican algunos de los mejores whiskys del mundo.

Que al ver la botella puedas leer fácilmente estos tres nombres no es ninguna casualidad, ya que para sus fabricantes la procedencia es fundamental en todo su proceso de elaboración y la manera de influir en la comunidad de la zona es realmente importante para ellos.

Probar este producto es sin duda transportarse al clima lluvioso, los verdes prados y los acantilados de la zona.

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