Por qué comprar Brandy Gran Duque de Alba XO

Tres son los brandys que conforman el catálogo de la destilería jerezana, y dos de ellos participan activamente en la creación del tercero. Las soleras de Gran Duque de Alba y Gran Duque de Alba Oro combinadas son la materia prima que permiten dar forma a Gran Duque de Alba X.O., el orgullo de la empresa centenaria. Esta exquisita combinación termina de criarse durante largo tiempo en botas de roble americano que previamente han contenido Don Guido, un reputado Pedro Ximénez con una vejez de 20 años certificada por el Consejo Regulador del Sherry.

Notas de cata. Vista, olfato y gusto

Una botella sobria, de ancha panza, con el color azul como protagonista y la perenne imagen de Fernando Álvarez de Toledo y Pimentel es el encargado de “batirse en duelo” con todo aquel que no rinda el respeto que se merece este extraordinario brandy jerezano. De color caoba oscuro y destellos brillantes, una vez abierto y vertido en un vaso se adivinan aromas a pasas, uva, ciruela, vainilla y barniz de mueble antiguo, resultado de sus largos años de crianza. Por último, en boca se presenta complejo y majestuoso, a la vez que untuoso y aterciopelado. Además, contiene un retronasal intenso, persistente y muy largo.

Cómo degustarlo. Maridaje

Por su carácter inigualable, desde Yo pongo el hielo recomendamos degustar Gran Duque de Alba X.O. sólo, o en su defecto acompañado de varias piezas de hielo para dotarlo de un matiz más refrescante. Quesos curados, chocolate negro, turrón o frutos secos son los compañeros ideales de este señorial brandy si se quiere acompañar de algo más sólido.

Los creadores del Brandy de Jerez

La leyenda del Gran Duque de Alba comienza a mediados del siglo XX, con la amistad entre el agente en Madrid de la bodega jerezana y Jacobo Fitz-James Stuart y Falcó, XVII Duque de Alba. Ante la próxima salida al mercado de un brandy de la compañía, el agente propuso al duque prestar su nombre al producto. Tras probarlo, el noble sugirió una idea mejor: utilizar el nombre de aquel que más había engrandecido la casa de Alba: Fernando Álvarez de Toledo y Pimentel, Gran Duque de Alba.

Antes de esto, la Bodega Williams & Hubert ya tenía solera en el mundo de los brandys. Fundad en 1877 por Sir Alexander Williams, con el paso de los años fue mejorando sus productos y adquiriendo gran fama nacional e internacional, y, sin ir más lejos, participando activamente en la creación de la Denominación de Origen Jerez-Xérès-Brandy.

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